Ensaladas, salsas, pizza, rellenos… Los champiñones están presentes en un sinnúmero de recetas naturales, y son con mucha diferencia el tipo de hongo que más se consume a escala mundial. Sólo en Estados Unidos constituyen un 90% de la ingesta total de hongos de la población, y su delicioso sabor, textura esponjosa y bajo precio así lo hacen posible.
Sin embargo, a pesar de su popularidad, los champiñones han sido pocas veces objetivo de estudio para la ciencia. Es sabido que su valor nutricional es rico, pero poco sabemos de sus beneficios concretos para la salud. Para romper con esta inactividad, investigadores del HNRCA Nutritional Immunology Laboratory han estudiado el poder de los champiñones para incrementar la actividad del sistema inmune.
En un análisis de laboratorio con animales, Simin Meydani y Dayong Wu descubrieron el potencial de estos deliciosos hongos para actuar positivamente sobre las células del sistema inmune encargadas de fabricar glóbulos blancos que protejan a nuestro organismo.
Publicando su trabajo en The Journal of Nutrition, los investigadores destacan la capacidad de los champiñones para incrementar la actividad del sistema inmune y con ello proteger a nuestro cuerpo de bacterias y virus que ingresen en él.
Por si no fuera poco, investigadores del Beckman Research Institute en Duarte, California, han comprobado que consumiendo nada más que 100 gramos de champiñones a diario podemos suprimir el crecimiento de tumores de cáncer de mama en mujeres. De esta manera, personas que sufran de esta enfermedad encuentran en estos hongos un apoyo natural para detener su accionar negativo.
Los estudios son interesantes, y destacan con justicia el potencial beneficioso de un alimento delicioso y capaz de actuar como alternativa a varios problemas de salud.
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