La cebada es un alimento que se utiliza desde la antigüedad, con un contenido graso y de sodio muy bajos, y con abundante fibra soluble y proteínas, lo que lo transforma en ideal para ser consumido por niños en edad de crecimiento y mujeres que transitan un embarazo.
La misma posee muchas propiedades nutritivas, contienen enzimas, vitaminas, minerales y proteínas que favorecen el buen estado de nuestras células, sobre todo de las células de los órganos internos y de la piel. Es rica en potasio y sodio, que colaboran con el equilibrio de las células y evita la retención de líquidos pero al mismo tiempo nos previene de la deshidratación.
Es indicada para los deportistas ya que ayuda a reponer las sales minerales que se pierden durante la actividad física, y refuerza los efectos de los ácidos producidos durante los máximos esfuerzos musculares.
Por otro lado contiene gran cantidad de aminoácidos esenciales, y unas 20 enzimas que son imprescindibles para que nuestro organismo realice sus funciones saludablemente.
Se la puede consumir en zumos, los cuales son alimentos con propiedades mineralizantes y que al mismo tiempo producen un efecto tonificante y depurativo, ayudando a conseguir el equilibrio químico de nuestro cuerpo sin provocar cambios dañinos en la alimentación .saluddiaria.com
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