Las zanahorias, son unas deliciosas hortalizas, ricas en betacarotenos y vitaminas A y C; que se pueden consumir de diferentes maneras, para aprovechar mejor sus propiedades y beneficios colaborando con nuestra salud.
El zumo de zanahorias se puede consumir en diversas cantidades, entre 50 y 400 gramos al día, teniendo en cuenta siempre limpiar correctamente las hortalizas, de polvo e impurezas, sumergiéndolas en agua y luego raspando la superficie que la recubre sin eliminar del todo su cáscara porque es en ella dónde existe la mayor cantidad de beneficios saludables, entre ellos el caroteno como dijimos antes presencia de vitamina C y vitamina A.
Si licuamos un kilo de zanahorias, obtendremos aproximadamente un cuarto kilo de líquido que podemos diluirlo con un poco de agua y agregarle limón si es de vuestro agrado. Por otro lado también es una excelente combinación el zumo de zanahorias con zumo de naranjas.
Entre sus beneficios, nos cabe destacar, que el zumo de zanahorias es un poderoso antiséptico, estabilizador de la sangre, y ayuda en procesos de desórdenes digestivos. Colabora en las dietas que se desea perder peso, y es un complemento perfecto para aquellas personas que padecen reumatismo, anemia, y acidez estomacal.
Si lo mezclamos con zumo de limón y miel es ideal para combatir enfermedades invernales sobre todo afecciones del pecho y catarros.
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